¿Qué debería saber si quiero dejar mi trabajo, dejarlo todo atrás y viajar durante un año?

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Deberías saber que:

• vas a necesitar la mitad de las ropa que crees que vas a necesitar y el doble del dinero.
• Después de volver al cabo de un año, la mayoría de las personas a tu alrededor van a estar haciendo lo mismo que cuando te fuiste, parecería que nada ha cambiado.
• No vas a poder volver a ver muchas cosas con los mismos ojos.
• Necesitas mucho menos de lo que crees que necesitas.
• No es tan buen negocio comprar los pasajes llamado “around the world”. Te quitan flexibilidad y pueden no ser un gran ahorro.
• Si no vas a viajar con tu pareja, va a ser difícil continuar con una relación existente a larga distancia después de todas las personas que vas a conocer.
• Las visas pueden ser un dolor de cabeza para algunos países, asegurate de solicitar las complicadas mientras aún tengas tu trabajo (así es más fácil que te las den)
• El idioma de los viajeros es inglés, no necesitas ser un experto, pero si de verdad quieres aprovechar tu aventura, yo pienso que es algo necesario.
• Muchas personas te dirán que estás loco. No hagas caso, el corazón quiere lo que el corazón quiere.
• Visita al médico antes de irte, nunca sobra.
• Un seguro de viaje mundial es costoso, pero si puedes pagarlo, te da tranquilidad financiera.
• Lleva al menos una tarjeta de crédito. Airbnb, Hostelworld, aerolineas y hoteles funcionan a través de tarjetas de crédito, hace todo mucho más fácil.
• No te lleves todo tu dinero en efectivo. Depositalo en el banco y usa tu tarjeta debito en cada país que llegues para sacar dinero. Las tasas de cambio son mejores que en cualquier casa de cambio y dependiendo de tu banco muchas veces los retiros son gratis o a bajo costo en comparación con la conveniencia.
• No te arrepentirás de haberte ido.
• Viajar es adictivo.
• Siempre podrás conseguir otro trabajo, pero viajar joven es una experiencia muy diferente a viajar con 65 años.
• Habrá días malos.
• Habrá días muy, muy buenos.
• Si no te decides sobre una fecha, tu plan podrá volverse algo que hagas “algún día” y algún día nunca llega.