¿Cómo fue la vida de los soldados Alemanes en Alemania después de la Segunda Guerra Mundial?

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Una guerra perdida es una carga pesada. Algunos agregaron hasta 10 años adicionales como prisioneros de guerra en Siberia. Muchos murieron en los campamentos, otros murieron después de regresar a casa cuando se comieron la primera gran comida despues de pasar muchos años. Otros descubrieron que su esposa se había vuelto a casar o se había suicidado. Los que sobrevivieron, no fueron reconocidos por lo que habían hecho, pero tampoco fueron despreciados.

Habiendo regresado de la guerra, los ex soldados trabajaron extremadamente duro, muy disciplinados. Lo que también parecía haberlos distraído de sus experiencias durante la guerra. El país prosperó, y el omertà, por no hablar del Naziismo, fue sentido común hasta finales de los años sesenta. Los primeros años de la República Federal fueron muy conservadores. Parecía que todo el mundo había hecho algo malo y prefería no hablar demasiado de la guerra, sabiendo que los verdaderos chicos brutales se saldrían con la suya en ese momento. Cuando se conocian, discutían cómo podrían haber ganado la Segunda Guerra Mundial: "Si hubiera estado a cargo en el Ostfront, hubiera llevado a todos los Panzer juntos y hubiera golpeado el" Iwan "en el norte, donde menos se lo esperaban... "

Además, sus recetas eran sorprendentemente similares: empujar más duro, concentrarse más, ignorar las bajas y producir más "Wunderwaffen". Algunos consideraron a Hitler como un hombre visionario, que perdió la Segunda Guerra Mundial porque "demasiados perros son la muerte de los conejos". La mayoría de ellos eran agricultores. Hicieron un poco de dinero extra cortando madera en el invierno. Y mientras se sentaban en la chimenea para calentarse, cantaban canciones Rusas. ¿Síndrome de Estocolmo?

Los soldados normales estaban en mejores condiciones que las antiguas víctimas de los nazis, o las personas que habían sido obligadas a exiliarse. Entre los sobrevivientes, fueron los más frustrados. Nunca reconocidos, si no despreciados por abandonar el país en tiempos de guerra, tuvieron que ver a algunos nazis triunfar y a nadie le importó. Muchos intelectuales preferían no regresar a Alemania en los años cincuenta y principios de los sesenta. 1968, la época de la revuelta estudiantil, fue un punto de inflexión:

Las generaciones más jóvenes hicieron preguntas sobre el pasado. El país cambió mucho a raíz de ello.

Tuve contacto con muchos ex Nazis.

Solo algunos de los que he conocido mostraron actitudes y sentimientos como se esperaba, es decir, una mezcla de culpa, ira y algún tipo de abuso. Estos "tipos suaves" parecían haber terminado la guerra con suerte de salir con vida. Los tiempos Nazis no fueron buenos tiempos para ellos. Ellos no querían que se les recordara eso. Se escaparían en algún gesto bonhomie: "Es bueno que esto haya terminado, mi muchacho".

La mayoría de ellos se declararon "no culpable", cuando se les preguntó. Dijeron,"Tenía que seguir las órdenes y teníamos un juramento ..." No hablarían mucho sobre la situación.

(Pinterest)

Podías identificar los pocos "intransigentes" por la forma en que caminaban por la calle. Caminaban más rápidos, más comprometidos. Arreglando todo con sus ojos. Realmente eran diferentes. Manejaron la democracia y todo lo que la acompaña con ironía. Sonreían y llevaban su gorra en un cierto ángulo, como se puede ver en las fotos de los temerarios de la Wehrmacht: una extraña mezcla de coraje y obstinación, además de estar de pie cuando lo era necesario. Supongo que les prometieron a sus esposas que no hablarían demasiado. Pero a veces lo hacían. Todavía llevaban el uniforme de los Führers en el interior y consideraban que un hombre que tenía el mando total era la forma más eficaz de liderar un país. A menudo se parecían en organizaciones como los bomberos, cuyos uniformes estaban extrañamente cerca de la Wehrmacht.

Uniformes de bomberos Nazis (Pinterest). Recuerdo que los bomberos llevaban partes de este uniform. Aunque un poco diferente que esta foto, la forma de los cascos era exactamente la forma de los cascos Nazis en negro.

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¿Y qué hay de su actitud hacia el Naziismo?

Una vez más, la gran mayoría no quería que los Nazis regresaran o que fueran a la guerra. Pero en lo profundo de sus corazones, muchos todavía sentían pena por Hitler, como se puede ver en frases como "Debajo de Adolf, esto no habría sucedido", por ejemplo, cuando se hablaba de cómo lidiar con el desempleo o cómo hacer que los perezosos hippies de los años 60 y 70 comenzaran a trabajar. Recuerdo algunas malas discusiones con las generaciones más jóvenes, que a menudo terminaban en gritos "¡Wenn's euch nicht passt, geht doch rüber!" ("Si no te gusta aquí, ¡múdate a Alemania Oriental!"). Al final, los soldados Nazis fueron confrontados con el pasado por sus nietos, pero solo en parte. Demasiados se salieron con la suya. Muchos de nosotros no supimos en realidad qué fue exactamente lo que hicieron nuestros abuelos, y sí, esto para muchos es una gran carga.