La dinastía ptolemaica fue fundada por Ptolomeo I. Esta dinastía gobernó en el Antiguo Egipto durante el período helenístico desde la muerte de Alejandro hasta el año 30 a. C., en que se convirtió en provincia romana.

Ptolomeo I, el Salvador, fue un general al servicio de Alejandro Magno y uno de los tres diádocos que se disputaron el control de su extenso imperio. Tras actuar como gobernador de Egipto a la muerte de Alejandro, Ptolomeo decidió proclamarse faraón en el año 305 a.C.

Ptolomeo I nació en el año 367 a. C. en la ciudad de Macedonia. Era hijo de Lagos, un hombre perteneciente a la aristocracia macedonia, y de Arsínoe, una mujer relacionada con la dinastía argéada.

Desde su infancia fue muy amigo de Alejandro Magno y con el paso de los años se convirtió en su guardia personal, fue parte de las campañas que se llevaron a cabo en el Imperio Persa, en donde llamó la atención como un general prudente y diestro, lo que lo impulsó a convertirse en uno de los lugartenientes más cercanos al monarca. Asimismo, fue uno de los hombres que marchó al lado del joven heredero en su breve exilio del año 337 a. C.

Tras la muerte del rey Filipo II y la ulterior coronación de su hijo Alejandro, Ptolomeo I fue parte de los hetairos en las campañas europeas entre los años 336-335 a. C. del nuevo monarca. En el año 330 a.C. fue asignado para el puesto de guardaespaldas y mientras ocupaba este cargo fue el responsable de la captura de Bessos, el asesino de Darío III de Persia.

Más información: es.wikipedia.org