"El molino de la Galette" (Moulin de la Galette), 1887, es un Óleo sobre lienzo. La obra fue pintada en París por Vincent Van Gogh (1853-1890) cuando empezó a crear paisajes post-impresionistas de brillantes colores, es además, de una de las dos únicas pinturas pertenecientes a su serie de obras representando molinos de Montmartre que aún se conservan en una colección privada. Se mostró por última vez al público en 1965.

Durante los dos años siguientes a su llegada a París en 1886 para vivir con su hermano Theo, Van Gogh experimentó una impresionante evolución artística, el pintor dejó de producir escenas rurales holandesas y comenzó a pintar algunas de las obras más innovadoras, coloristas y expresivas.

Van Gogh pintó Moulin de la Galette en abril de 1887, y forma parte de su serie de pinturas de molinos del animado barrio artístico de Montmartre. Esta vibrante obra lleva la firma de Van Gogh, lo que es poco frecuente.

Theo van Gogh no sobrevivió mucho tiempo a la muerte de su hermano Vincent, de forma que la vivienda de Theo y todas las cartas y pinturas de Vincent, incluida Moulin de la Galette, pasó a ser propiedad de su viuda, Johanna van Gogh-Bonger.

En 1906, Johanna entregó el cuadro al pintor Isaac Israëls, que había sido su amante durante tres años tras la muerte de Theo, a cambio de un retrato. Más adelante pasó a ser propiedad de Charles W. Engelhard Jr., millonario americano en el que Ian Fleming se basó para crear al archivillano Goldfinger.

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