Esta es una de las citas más famosas de Rudyard Kipling. Es de un discurso que hizo en el Real Colegio de Cirujanos de Londres en 1923, en el que utilizó una metáfora para comparar las palabras con las drogas, en referencia al efecto persuasivo que las palabras pueden tener en las personas. Cada vez más gente aprecia el dominio de la poesía y la prosa del que Kipling hacía gala, así como la gran variedad de su obra literaria. Su autobiografía "Algo de Mí" se escribió en 1935, el último año de su vida y fue publicada póstumamente.

Más información: www.integrativelongevity.org