El muralismo mexicano es un movimiento pictórico iniciado en la década de 1920, como parte de las políticas de modernización, tras la revolución de 1910. Con el propósito de construir una identidad nacional para integrar a los diferentes sectores de la sociedad mexicana, ante las desigualdades sociales de la época, sobre todo educativas y culturales.

El presidente Álvaro Obregón, nombró a José Vasconcelos secretario de educación pública, quien desarrolló el primer programa cultural del Estado, para construir y reforzar la identidad y la memoria colectiva, inspirado en las ideas de los rusos Anatoli Lunacharsky y Máximo Gorki.

Vasconcelos patrocinó al Dr. Atl Gerardo Murillo, pintor y maestro considerado el padre del muralismo mexicano. Él fundó el Centro Artístico en Ciudad de México, que buscaba la creación de un arte nacional, expresando sus ideas a través de murales.

El soporte esencial de muralismo mexicano que daría la monumentalidad al concepto artístico, fueron los muros disponibles en edificios del Estado, escuelas, universidades o iglesias.

Los representantes de muralismo mexicano son: Dr Atl, Diego Rivera, José Clemente Orozco, David Alfaro Siqueiros, Jean Charlot, Roberto Montenegro, Ramón Alva, Fernando Leal, Fermín Revueltas, Federico Cantú, entre otros.

Los artistas e intelectuales mexicanos buscaban consolidar los ideales sociales de la revolución, para cambiar las ideas raciales contra los indígenas, creadas durante el periodo colonial.

Más información: es.m.wikipedia.org