Bon bon terres, bon bon tá o haïtische galettes (galletas haitianas), se hacen mezclando el suelo con sal, agua y grasas vegetales. A partir de esta mezcla se hacen discos planos que se secan al sol.

Los pasteles tienen poco valor nutricional y son comidos por personas que viven en la pobreza para satisfacer el hambre. Si estos pasteles se consumen con el tiempo, esto puede conducir a dolor abdominal y desnutrición.

Además del consumo en un momento de necesidad y pobreza, las galletas haitianas son vistas por algunos como una medicina tradicional y una fuente de calcio para las mujeres embarazadas.

La fabricación de galletas de lodo es una costumbre en Haití que existe desde antes del terremoto de siete grados Richter que acabara con la vida de 316.000 personas, hiriera a otras 350.000 y más de 1,5 millones se quedara sin hogar.

A lo anterior debemos sumarle la gran corrupción existente, la pésima distribución del PIB, del cual, el 90% está en manos del 1% de la población que vive en Puerto Príncipe y por ultimo, a que la inmensa mayoría vive con un dólar o menos al día.

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