A la salida del diluvio universal y después que los descendientes de Noé se multiplicaron en la tierra todos los seres humanos tenían una sola lengua, es decir: existía un solo idioma con el cual comunicarse.

La gente que salió del oriente y llegaron a la llanura de Sinar y que luego se terminaron estableciendo en ese lugar y pensaron en utilizar ladrillos cosidos con fuego en lugar de piedra y asfalto en lugar de mezcla y así comenzaron a hacer una gran torre donde pretendían llegar hasta el cielo.

Al ver Dios la torre que estaban edificando los hombres y que nada los haría detenerse de la obra de sus manos en clara actitud de independencia del mismo Dios, Dios decidió confundir su lengua para que ninguno entiende el hablar de su compañero y así los esparció Dios sobre la faz de la tierra y dejaron de edificar la ciudad.

Por esto fue llamado el nombre de ella Babel, porque allí confundió Dios el lenguaje de toda la tierra, y desde allí los esparció sobre la faz de toda la tierra.

Este es el origen de las distintas lenguas en el mundo.

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