La primera sonda israelí con destino a la Luna fue enviada al espacio en febrero de 2019.

Denominada Bereshit (Génesis, en hebreo), la sonda fue lanzada en la noche del jueves 21 de febrero de la base estadounidense de Cabo Cañaveral en Florida.

El aparato de 585 kilos fue enviado al espacio con un cohete Falcon 9 de la firma estadounidense SpaceX, que pertenece al empresario Elon Musk.

La sonda efectuó varias órbitas elípticas alrededor de la tierra, aprovechando la atracción gravitacional para ir tomando velocidad en forma lenta y sin gasto de combustible, antes de dirigirse a la Luna.

El día 11 de abril, fecha prevista para el alunizaje, el artefacto falló en su intento por llegar a destino. Fue poco después de haber enviado una foto en la que se veía que estaba muy cerca de la superficie lunar.

Los científicos a cargo de la misión confirmaron que el intento de que la sonda llegara intacta al satélite de la Tierra había fracasado.

No obstante el fracaso, Israel se ha sumado al exclusivo grupo de 5 países que habían intentado llegar al sateélite natural de la tierra previamente.

Se sabe que EE UU logró que el hombre pisara suelo lunar en 1969 y Rusia había logrado posar un vehículo de exploración sobre su superficie con anterioridad; adicionalmente, China, Japón e India han enviado misiones no tripuladas que han orbitado el satélite, aunque en algún caso el descenso haya sido abrupto como le sucedió a Israel.

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