La entomología forense es la ciencia que estudia los artrópodos encontrados en un cadáver, para estimar el tiempo trascurrido desde la muerte, la identificación de los posibles traslados del cuerpo, y las características de las zonas de procedencia.

Los episodios entomológicos postmortem de modo resumido, inician con los dípteros, a continuación suelen aparecen los coleópteros y después de un tiempo convivirán en nichos diferentes coleópteros y dípteros, por ultimo aparecerán coleópteros, ácaros y lepidópteros.

La propia secuencia de colonización y las especies implicadas variarán en función de múltiples parámetros, entre ellos la región biogeográfica, época del año y características ambientales particulares del hábitat en que se encuentre el cadáver.

El tiempo transcurrido desde la muerte es un asunto de crucial importancia desde el punto de vista legal, para establecer culpabilidad o para identificar a la persona desaparecida.

En cadáveres humanos se estudia desde el punto de vista histológico, químico y zoológico. Sin embargo, transcurridas 72 horas, la entomología forense es el mejor método.

Por lo general, en las primeras fases de la descomposición las estimaciones se basan en el estudio del crecimiento de una o dos especies de insectos, particularmente dípteros, mientras que en las fases más avanzadas se utiliza la composición y grado de crecimiento de artrópodos encontrada en el cuerpo y se compara con patrones de sucesión de fauna para el hábitat.

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