La sámara o semilla alada, es un fruto de tipo esquizocarpo (originado por un gineceo de 2 o más carpelos unidos, que al madurar se separa en segmentos parecidos a frutos) seco, indehiscente(no se abre), donde los mericarpos están provistos de alas desarrolladas a partir de las costillas longitudinales, hechas de un tejido fibroso muy ligero. El ala hace que la fruta se mueva por el aire mientras gira como helicóptero siendo una de las características más importantes de este tipo de frutos.

Este fruto puede simular las hojas de los árboles y está presente en olmos, fresnos, arces y abedules. Su semilla puede estar al centro como en olmos y fresnos; a un lado, como en arces y cenizas, y a veces una misma sámara puede estar unida a otra por un extremo dando paso a lo que se conoce como disámara(tulipán y abedul). Allí dentro germinará.

Muchas sámaras no contienen semillas(partenocarpia) como sucede con los olmos, lo cual sería una estrategia para que a pájaros y depredadores no les sea fácil encontrarlas y se perpetúe así su especie; cada árbol y cada ramilla presentan una gran variación en la proporción de frutos sin semilla, que varía también según los años. Algunas plantas presentan semillas aladas, que pueden confundirse con sámaras, esto ocurre por ejemplo en la catalpa.

Varias de ellas son comestibles como las sámaras de arce: si son jóvenes y verdes, en primavera, serían más sabrosos; crudos en una ensalada o salteados con otras verduras tiernas y brotes.

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