El damalisco es un mamífero que vive en rebaños formados por machos y hembras, en un total de ocho animales. Se muestra activo por la mañana y al atardecer; el resto del día descansa al abrigo del intenso calor. En algunas regiones hacen migraciones temporales.

Es un rumiante que mide entre 1.4 y 1.6 metros y un peso entre 60 y 80 kilogramos y se alimenta del pasto. Damalisco de frente blanca, en la actualidad prácticamente extinto, es una especie de antílope que solía desplazarse por las llanuras de África del Sur. El damalisco pigargo, considerado de la misma especie que el anterior, forma parte de una raza algo más extensa y sus cuernos son más bien de color grisáceo en vez de negros.

Ambos antílopes se caracterizan por su brillante pelaje y por poseer en la frente una banda de pelo conspicua de color blanco, pero en el caso del damalisco de frente blanca está interrumpida por una banda oscura y estrecha situada entre los ojos. Los pocos supervivientes de esta especie viven en zoológicos y en granjas particulares.

El apareamiento se da entre marzo y abril con la llegada de la lluvias. La lactación se prolonga durante cuatro meses. Su madurez sexual se produce a los dos años y su esperanza de vida es de unos 17 años.

Los enemigos de los damaliscos son los chacales y los caracales, que atacan principalmente a las crías. Debido a la caza indiscriminada y a la presión ejercida por la agricultura y ganadería, están en grave peligro de extinción.

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