En la vida diaria podemos sufrir accidentes que nos pueden marcar física y emocionalmente, como las huellas que deja una quemadura. Muchos no sabemos qué hacer cuando, por ejemplo, una chispa de una parrilla cae sobre nuestra ropa y esta se prende.

Para afrontar un momento como ese y evitar en lo posible sufrir un daño muy severo, se debe realizar lo siguiente:

- Nunca se debe correr. Si su ropa se ha prendido, la persona debe detenerse porque, si corre, con el aire aviva más el fuego.

- Tirarse al suelo y cubrirse el rostro con las manos. Esto es muy importante para evitar quemarse la cara.

- Rodar sobre el suelo. Una vez en el piso la persona afectada por el fuego debe empezar a rodar sin necesidad de ayuda de nadie para evitar que otra persona se lastime al querer auxiliarla. El propósito de esta medida es quitarle todo el oxígeno posible a las llamas para no dejar que sigan avanzando.

- Nunca tratar de sacarse una prenda que está en fuego. Si su polo, blusa u otra prenda superior está en llamas, no intente quitársela, porque podría quemarse el rostro.

También que es importante tener siempre presente que como primeros auxilios a una persona quemada solo se le debe colocar agua fresca, sea la quemadura de primer, segundo o tercer grado, porque otro producto puede contaminar la piel dañada.

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