El quemado, ponchado, balón escondido o cementerio, como se le conoce en distintas partes de América Latina, es tal vez uno de los juegos más populares del mundo. En inglés es conocido como "dodgeball", se estima que 10 millones de personas lo practican en el mundo.

En los últimos años ha pasado de ser una diversión callejera a un deporte que, debido a su rápido crecimiento, acaba de tener su primer campeonato mundial en Manchester, Reino Unido, con la presencia de selecciones de ambos sexos y representantes de 10 países.

Es un juego rápido, ágil, que puede ser practicado por cualquier persona que pueda correr, lanzar y agarrar una pelota, es una de las razones por lo que ha crecido en popularidad.

Actualmente en Reino Unido unas 750 000 personas practican este deporte, en Estados Unidos están inscritos 9,7 millones de jugadores de ambos sexos y de diferentes edades.

Este juego tuvo su origen en las escuelas de Japón hace aproximadamente 60 años. Sus reglas básicas fueron escritas en la calle. Hay dos equipos de seis personas cada uno, que se enfrentan en una cancha con una división intermedia.

El objetivo de este juego es tratar de golpear con seis pelotas dispuestas para el juego a los rivales del equipo contrario, para eliminarlos en la cancha. El juego lo gana el equipo que logre sacar a todos los rivales.

Otra opción para ganar es que al terminar el tiempo reglamentario de tres minutos, el equipo gana cuando tiene más jugadores dentro de la cancha.

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