El homínido de Denísova o Denísovano, es una especie humana descubierta muy recientemente.

Es el nombre dado a una especie o subespecie del género Homo, identificada a través del análisis del ADN de restos óseos descubiertos en 2010, encontrados en las cuevas de Denísova, en Altai, Sibería y que pertenecieron a una niña a la que se denominó mujer-X.

Fue descubierto por el equipo del Instituto Max Planck comandado por Svante Päävo, quien ha sido galardonado este año por el Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica por sus contribuciones en este campo.

Los denísovanos vivieron durante un período que abarca entre hace un millón de años y hace 40 000 años. Migraron de África para habitar Eurasia, zona que compartieron con neandertales y sapiens.

Parte de su secuencia genómica sobrevive especialemente en las poblaciones de humanos de las regiones de Oceanía de Papúa Nueva Guinea, aborígenes australianos y melanesios, humanos modernos que tienen entre un 4% y un 6% de material genético de estos homínidos.

Una pregunta interesante que lanza la Agencia Sinc sobre el descubrimiento del cruce entre especies humanas es si su resultado es entonces la misma especie, entendida esta como organismos que se pueden entrecruzar y tener descendencia fértil.

Más información: es.m.wikipedia.org