Para los musulmanes, el peregrinaje a La Meca forma parte de uno de los aspectos fundamentales de su fe, los denominados pilares del Islam. Cada año, cerca de tres millones de peregrinos se dirigen a la Ciudad Santa en el peregrinaje mayor o Hajj durante el duodécimo mes del calendario musulmán: du l-hiyya que significa, literalmente, «el de la peregrinación».

La Meca, situada al oeste de la península, se ubica a 80 km del mar Rojo . Es la ciudad natal de Mahoma y la más importante de todas las ciudades santas del islam. Antes de que Mahoma predicara el islam, ésta era ya para los paganos una ciudad santa, con varios lugares de importancia religiosa, entre ellos la Kaaba, una construcción con forma de cubo que constituye el lugar sagrado y de peregrinación religiosa más importante del Islam.

Se cree que hace unos 1.400 años, el profeta Mahoma ofreció su último sermón desde el Monte Arafat durante la peregrinación anual a La Meca, pidiendo la unidad de los musulmanes. Para ellos rezar este día en el Monte Arafat es la mejor forma de borrar sus pecados del pasado y comenzar de nuevo.

Para dejar atrás los símbolos del materialismo, los varones se visten con ropas blancas que simbolizan la humanidad y la igualdad. Las mujeres no utilizan maquillaje ni perfume, se cubren la cabeza y visten ropa holgada.

Muy pocos no musulmanes han podido ver los ritos y rituales del Hajj, ya que está totalmente prohibida la entrada de no creyentes en La Meca y en Medina.

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