En la mitología griega, ¿quién fue convertida en un árbol de laurel para escapar del dios Apolo?
En la mitología griega Dafne era una dríade (ninfa de los árboles), hija del dios río Ladón de Arcadia con Gea o del dios río Peneo de Tesalia con Creúsa, una ninfa de las aguas que además era sacerdotisa de Gea.
Dafne fue perseguida por Apolo, a quien Eros había disparado una flecha dorada para que se enamorase de ella, pues estaba celoso porque Apolo había bromeado sobre sus habilidades como arquero, y también afirmaba que el canto de este le molestaba. Dafne huyó de Apolo porque Eros le había disparado a su vez una flecha con punta de plomo, que provocaba desprecio y desdén. Durante la persecución, Dafne imploró ayuda a su padre, el dios río Ladón, quien la transformó en laurel.
Afectado por lo que acababa de suceder y pensando en cuánto la amaba, prometió que ella sería su árbol, el que le representara siempre. De esa manera, sus hojas adornarían su cabeza y la de aquellos guerreros, atletas, poetas o cantores que triunfaran, convirtiéndose en símbolo de triunfo y victoria.
Este mito ha sido representado artísticamente numerosas veces en la historia. Probablemente una de las obras más conocidas sea la creada entre 1622 y 1625, por Gian Lorenzo Bernini, quien esculpió en mármol 'Apolo y Dafne'. En ella se puede advertir a Apolo alcanzando a Dafne mientras ella intenta escapar. Apolo está coronado con una corona de laurel que presagia la metamorfosis de Dafne en árbol de laurel.
Más información:
es.wikipedia.org
ANUNCIO