Es el lugar más insólito y fotogénico del litoral de Montenegro, es un centro turístico costero situado 8 km de ruta al sureste de Budva, en la Riviera de Budva. Originalmente era una isla, pero en la actualidad un centro turístico de alta gama. Es Sveti Stefan se alza desde las faldas del pueblo sobre una minúscula isla, de apenas 12.000 metros cuadrados, que se enlaza con el continente por un estrecho istmo artificial. Sus casas de piedra con techos rojos, configuran un lugar en perfecta armonía estética.

Sveti Stefan se caracteriza justamente por ser una pequeña isla que cuenta con el hotel de cinco estrellas Aman Sveti Stefan.

El pueblo de pescadores que se ubicaba en la Edad Media fue fortificado por los venecianos, logrando un enclave defensivo contra los ataques otomanos.

La situación de pobreza en el siglo XX provocó que la mayoría de la población emigrase a América o Australia, dejando prácticamente inhabitada Sveti Stefan después de la Segunda Guerra Mundial.

A principios de los años 60, cuando la villa ya estaba abandonada y en desuso, los pintores Petar Lubarda y Milo Milunovic decidieron hacer de la vieja residencia real y de todo el pueblo, un complejo turístico. Tito, el mandatario Yugoslavo promovió la creación de un hotel de lujo.

El istmo de arena y la posterior carretera que permite acceder dentro donde además de instalaciones de wellness y relax, está dotada de un puerto para yates, helipuerto y tres preciosas playas de arena rosada.

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