El Reino de Jotán estaba ubicado en lo que es hoy la provincia más occidental de China, Xinjiang o Sinkiang.

Fue un centro importante en la historia de la ruta de la seda, que interconectó Europa y Asia durante muchos siglos.

Para el siglo VI Jotán (Hotan, Khotan o Yutian) se había convertido en un centro de producción de seda vibrante y próspero en la antigua Asia.

Si bien no está del todo claro como se introdujo la producción de seda en Jotán, según la leyenda, el conocimiento se adquirió gracias a la novia que un rey llevó del sur de China.

El gobernante de Jotán se casó y convenció a su novia para que trajera gusanos de seda de su casa.

Hoy en día el recuerdo de Jotán sobrevive en los restos de santuarios budistas que se encuentran en el desierto de Taklamakan ubicado en la región.

Más información: es.m.wikipedia.org