El monte Rheasilvia en el asteroide Vesta fue descubierto por el Hubble en 1997 pero no sería bautizado hasta la llegada de la sonda DAWN de la NASA en 2011.

Es un enorme cráter de impacto que cubre casi el 80% del diámetro del asteroide con 460 km. El macizo central se eleva casi 22 km desde el área circundante, una depresión de 8 km de profundidad, así como diferentes escarpes del borde del cráter que se elevan entre 12 y 10 km, superando los 20km de altura total.

Es probable que el impacto que formó esta estructura liberara buena parte de la masa del asteroide, dando lugar a un gran número de asteroides menores, conocidos como asteroides de tipo V o de la Familia Vesta.

Posee una serie de escarpas alrededor de parte de su perímetro con alturas respecto al terreno circundante de entre 8 km y 12 km y una montaña central con un diámetro de casi 200 km y una altura de 23 km desde su base, lo que la sitúa entre las montañas más altas conocidas; en el Sistema Solar. El fondo del cráter, está a 13 km de profundidad respecto al terreno circundante.

Análisis espectroscópicos realizados con ayuda del Hubble, muestran que el impacto que produjo Rheasilvia consiguió penetrar la corteza de Vesta hasta llegar incluso a su manto. Además se superpone a un cráter aún más antiguo de 375 km de diámetro que destruyó parcialmente.

Este tipo de asteroides supone un 6% aproximadamente del total del Cinturón de Asteroides entre las órbitas de los planetas Marte y Júpiter.

Más información: es.m.wikipedia.org