La historia del Dóberman es bastante interesante, ya que está compuesta de un número de razas. Fue alrededor de 1850, cuando un alemán que trabajaba como policía decidió criar un perro que debía ser inteligente, fácil de entrenar, pero lo suficientemente agresivo para ahuyentar a los ladrones y los violadores potenciales de la ley. Carl Frederick Dobermann vivió en Apolda, Alemania Oriental, en el siglo 19. Durante su trabajo como policía y vigilante, emprendió la tarea de criar una raza de perro que fuera un excelente perro guardián.

Según él, estos perros debían ser alertas, temerarios, medianos, inteligentes, leales y agresivos. Serían perros de un solo hombre, dispuestos a obedecer las órdenes de su amo sin ninguna duda. Serían completamente valientes y listos para atacar a cualquier tipo de potencial atacante o enemigo, hombre o bestia.

No se sabe con seguridad acerca de las razas originales que conformaban los promeros dobermans, porque Doberman no mantuvo ningún registro de su programa de cría. Los criadores de la raza tienen la impresión de que los pastores alemanes, mastines, rottweiler, Doberman Thueringia, Beauceron y otros fueron utilizados como animales reproductores para crear esta nueva raza de perro guardián.

Fue después de la muerte del Dobermann, en 1894, que los criadores de perros en Inglaterra comenzaron a experimentar con el cruce de los Dobermans con galgos y terriers para conseguir un cuerpo más elegante y con un temperamento más agresivo

Más información: www.dobermanpedia.com