¿Cuántas hojas de papel hay regularmente en un resma?
Cuando la humanidad quiso entenderse por medio de las imágenes y la escritura, tuvo que recorrer un difícil camino, hasta llegar al descubrimiento de un soporte de fácil obtención y almacenamiento, barato, duradero e idóneo para poder plasmar sus inquietudes y saberes: el papel.
En 1440, Johann Gutenberg, de Maguncia, inventa el arte tipográfico, con el que se puede componer textos de cualquier extensión y obtener gran cantidad de copias.
La imprenta dio una verdadera medida del valor y utilidad del papel ya que reunía, además de sus cualidades gráficas, el ser abundante, barato (costaba la décima parte que el pergamino), duradero, trasportable y asequible a las enormes cantidades que requerían los impresores.
Una prensa de imprenta necesitaba tres resmas de papel diarias (1.500 pliegos); por ello existe una relación tan estrecha entre la manufactura del papel y la imprenta, no concibiéndose la prosperidad de una sin otra. A esto se debe que, entre finales del XV y mediados del XVI, Europa se cubra de molinos de papel.
Una resma es una unidad de medida tradicional para contar hojas de papel. Consiste en veinte manos de papel; a su vez, una mano de papel equivale a cinco cuadernillos, y un cuadernillo equivale a cinco pliegos de papel. Por tanto, una resma son 500 hojas de papel.
El término no ha sido homogéneo a lo largo de la historia, y por tanto también han existido manos de 24 hojas de papel que daban origen a resmas de 480 hojas de papel.
Más información:
www.interempresas.net
ANUNCIO