La FIFA necesitaba con urgencia una melodía que atrajera a las masas. Una llamada a un artista latino cambiaría la historia de los himnos mundialeros: el puertorriqueño Ricky Martin sería el elegido.

El 12 de julio, Francia disputaba el ansiado trofeo frente a un Brasil que venía de campeonar cuatro años antes. Antes de la salida de los equipos a la cancha, Ricky Martin se dio el lujo de cantar " La copa de la vida" (compuesta por Ian Blake y Desmond Child, con letra en español de Luis Gómez), para 80 mil personas en el Stade de France de Saint-Denis.

Esta presentación fue un hito importantísimo, entrando por el medio del estadio, con instrumentos de percusión atados al pecho como si fuese una desfile. La vibrante canción puso a bailar a masas en más de 40 países.

Luego la cantó en vivo en los Grammy 1999, siendo televisada por millones de personas. Madonna, Sting y los Rolling Stones lo llamaron para felicitarlo. Fue la canción que catapultó a Ricky Martin, a convertirse en una estrella latina internacional.

Su versión en inglés, “The Cup of Life” se ubicó en el puesto 45 de los “Hot 100” de Billboard y el primer lugar en los “European Hot 100”.

En los rankings internacionales, “La Copa de la Vida” se ubicó en el primer lugar en países como Alemania, Australia, España, Francia; consiguiendo además certificación oro o platino en dichos países.

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