No sólo a los humanos les gusta mostrar su afecto. También a los cuerpos cósmicos. Situada en la constelación de Casiopea, en el brazo de Perseo de la Vía Láctea, y a unos 7500 años luz de la Tierra, se encuentra IC 1805, también conocida como la Nebulosa del Corazón.

El motivo de este nombre debería ser obvio: su forma se asemeja a la de un corazón, y su interior brilla en rojo —lo que la clasifica como una nebulosa de emisión— a partir del hidrógeno ionizado en plasma por las estrellas cercanas.

El cúmulo de estrellas muy jóvenes y calientes —de apenas 1,5 millones de años— que se encuentra en el centro de la nebulosa se conoce como Melotte 15. La nebulosa tiene una extensión de unos 200 años luz.

Casiopea es una de las constelaciones compiladas en el catálogo estelar de Ptolomeo, el Almagesto, del siglo II. Fácilmente reconocible por sus cinco estrellas brillantes que forman un conocido asterismo del cielo circumpolar boreal.

Casiopea señala al norte (y a la estrella polar) apuntando desde sus extremos de la «M» o «W». Tiene al otro lado al Gran Carro de la Osa Mayor. Al ser tan fácil de reconocer es muy usada para encontrar el norte cuando no es posible utilizar a la Osa Mayor para este propósito, cuando ésta no es visible en cielos de latitudes templadas

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