Aunque Edimburgo es la segunda ciudad más grande de Escocia después de Glasgow, es la capital del país. Tenía aproximadamente medio millón de habitantes en 2018. Tiene una historia de más de 1000 años, y fue reconocida como capital de Esocia desde por lo menos el siglo XV.

Ya en la Edad Media, Edimburgo comenzó siendo un pequeño fuerte que, en el siglo VII, los ingleses capturaron y le dieron el nombre de Eiden's burgh (burgh es una palabra que antiguamente significaba fuerte). No fue hasta el siglo X cuando los escoceses recuperaron esta zona de Escocia.

A lo largo de las calles se conservan muchos edificios antiguos, como la Catedral de San Giles. La Ciudad Nueva fue construida a partir de 1767 y tiene muchos edificios georgianos. Edimburgo cuenta con un Parlamento escocés desde 1998, tras un referéndum celebrado en Escocia en 1997.

Escocia tiene una rica historia de ciencia e ingeniería, con Edimburgo produciendo una serie de nombres famosos. Incluyendo John Napier, inventor de logaritmos, nació en la Torre Merchiston y James Clerk Maxwell, fundador de la teoría moderna del electromagnetismo, en la calle India Street.

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