Copenhague, capital de Dinamarca es reconocida por ser una ciudad estratégicamente ubicada y por poseer un importante valor urbanístico, comercial y económico para la región. Se encuentra ubicada en la importante zona geográfica entre el mar Báltico y el norte de Alemania. Gracias a lo anterior, Copenhague se ha perfilado históricamente como un centro de comercio muy importante, trayendo riqueza a Dinamarca. Sin embargo, debido a su importante ubicación, en el siglo XIII se tomó la decisión de fortificar la ciudad,con el fin de controlar la entrada y la salida de las embarcaciones que allí llegaban y proveer mayor seguridad a la ciudad. Es importante anotar que las murallas que rodearon Copenhague se diferenciaban al no ser construidas en tierra, sino que fueron selladas con torres para dar mayor seguridad. Ello le imprimió más importancia y relevancia histórica a la ciudad.

Pese a sufrir incendios devastadores y una peste desgarradora en el siglo XVIII, Copenhague continuó destacándose por ser una ciudad próspera e importante para Dinamarca y Noruega. Su fortaleza económica le permitió recuperarse con rapidez y seguir creciendo para suplir las demandas demográficas crecientes.

Si bien Copenhague sufrió una invasión durante la Segunda Guerra Mundial hoy se perfila como un importante centro de Dinamarca y un centro económico y de negocios crucial para el país.

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