El cerro Santa Lucía es una pequeña elevación de apenas 69 metros, pero en la historia de Chile es enorme y uno de los lugares más representativos de Santiago, y ubicado en su corazón. Fue en el cerro Huelén -como lo llamaban antes de la llegada de los españoles- donde Pedro de Valdivia fundó la capital de Chile, justo el día de Santa Lucía, un 13 de diciembre de 1540. Más adelante se construirían fortificaciones militares y se instalaría el primer observatorio astronómico de Chile.

Se cree que los aborígenes lo llamaban Huelén, que significaría "dolor, desdicha",​ aunque su verdadera etimología aún no ha sido dilucidada y es controversial hasta el día de hoy. Otras posibilidades son que provenga de la palabra welen, a su vez derivada de la voz wele, pero con el significado de "desgracia, mal presagio".​ Es posible también que no sea una palabra de origen mapuche, sino que se trate de otra lengua local.

El Cerro Santa Lucía cambió su apariencia agreste en 1872, gracias al intendente de Santiago Benjamín Vicuña Mackenna, quien lo convirtió en un atractivo paseo. Además de variadas especies arbóreas, ornamentación de origen europeo y reliquias del pasado colonial chileno, en el Cerro Santa Lucía destacan atractivos espacios, como el Castillo Hidalgo, y las terrazas Neptuno y Caupolicán.

Más información: www.santiagocapital.cl