La diabetes mellitus (DM), es un conjunto de trastornos metabólicos, cuya característica común principal es la presencia de concentraciones elevadas de glucosa en la sangre de manera persistente o crónica.

Los síntomas más frecuentes de la diabetes son:

Poliuria (micción frecuente). En las personas con diabetes, al no producirse insulina o al ser esta insuficiente, la glucosa se queda en el torrente sanguíneo sin que pueda ser aprovechada. Para tratar de eliminar el exceso de azúcar, los riñones, aumentan la producción de orina y la persona afectada tiene ganas de orinar en todo momento a lo largo del día.

Polidipsia (sed excesiva), para poder producir más cantidad de orina, el organismo aprovecha al máximo sus reservas de agua, por lo tanto el cuerpo manifiesta que necesita recuperar líquidos para poder realizar sus funciones vitales mediante una intensa sed y tienen la necesidad de ingerir grandes cantidades de líquidos.

Polifagia (mucha hambre), Gracias a la insulina, las células del organismo aprovechan la glucosa que se obtiene de trasformar los nutrientes de los alimentos. Si el cuerpo no dispone de la cantidad adecuada de insulina o carece por completo de ella, las células se quedan sin energía y no realizan correctamente sus funciones. El cerebro genera una sensación de apetito, por la incapacidad de las células para nutrirse.

La polimialgia, se refiere al dolor y rigidez muscular por inflamación de las articulaciones y los tejidos que los rodean.

Más información: es.m.wikipedia.org