¿Cuál de estos alimentos NO es un producto lácteo fermentado?
La mayonesa, o mahonesa (en España), es una salsa emulsionada fría elaborada principalmente a base de huevo entero y aceite vegetal batidos, por lo que esta es la respuesta correcta.
De origen menorquín, generalmente se la sazona con sal, zumo de limón o vinagre. Se trata de una salsa de origen español emparentada culinariamente con el alioli. Aunque su origen ha sido disputa de eruditos desde comienzos del siglo XX. Hoy en día es empleada en multitud de platos internacionales como acompañamiento, por regla general de hortalizas y pescados.
El color de la mayonesa varía de casi blanco a amarillo pálido, y su textura de una crema ligera a un gel espeso. Se utiliza habitualmente en sándwiches, hamburguesas, ensaladas compuestas y en las patatas fritas. También es la base de muchas otras salsas, como la salsa tártara, la remoulade, la salsa golf y la rouille.
Por su parte, los productos fermentados de la leche, denominados también lácteos fermentados, son productos lácteos procedentes de los cultivos lácticos debido a la acción de las bacterias del ácido láctico (Lactobacillales) tales como los Lactobacillus, Lactococcus, y el Leuconostoc.
El proceso de fermentación incrementa la vida útil y de consumo del lácteo, mejorando la digestibilidad del mismo frente a la leche.
Hay pruebas de que los productos lácteos fermentados se producen desde aproximadamente el año 10 000 a. C. Entre los productos se encuentran la leche, el queso, el yogur, el kéfir, y la crema agria
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