El ópalo es un mineraloide del grupo IX (silicatos, tectosilicatos), según la clasificación de Strunz. Tiene una composición similar a la del cuarzo del que se diferencia porque tiene moléculas de agua en su interior. Su fórmula es SiO2•nH2O.

El ópalo es una piedra preciosa muy apreciada en joyería, aunque la valoración de esta depende de muchos factores. La calidad del ópalo se distingue por su pureza y capacidad de irradiación.

Se deposita a una temperatura relativamente baja y puede aparecer en las fisuras de casi cualquier tipo de roca, encontrándose más comúnmente con la limonita, la arenisca, la riolita, la marga y el basalto.

Muchos de los ópalos que se extraen en Etiopía, especialmente en los yacimientos de Welo, son ópalos hidrofanos. «Hidrofano» es un nombre utilizado para un ópalo poroso que tiene la capacidad de absorber agua.

La absorción de agua suele ir acompañada de un cambio de color o de transparencia. Estos ópalos suelen tener una gravedad específica menor que otros tipos de ópalo debido a su porosidad. Algunos de estos ópalos pueden absorber suficiente agua para producir un aumento de peso de hasta el 15%.

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