Nicholas Breakspear. (1100 - 1159), conocido como Adriano IV, fue el único Papa inglés, de 1154 a 1159. Se destacó en la época de la supremacía papal, donde los gobernantes estaban subordinados al Papa.

Inició la enemistad del Papado con el imperio de los Hohenstaufen, con guerras incesantes contra Guillermo el Malo y Federico I Barbarroja, por sus pretensiones de dominar los Estados pontificios y de intervenir en la designación de los obispados.

Su muerte ocurrida en 1159, en la ciudad italiana de Anagni, cuando Adriano IV volvía de camino a su palacio tras haber pronunciado un caluroso sermón contra el emperador Federico I Barbarroja, al que había amenazado de excomunión, decidió detenerse en una fuente y beber.

Mientras saciaba su sed un insecto revoloteaba alrededor de él, dando manotazos trató de echar aquella mosca. En uno de esos aspavientos y mientras hacía una pausa en el beber el insecto se metió en la boca del Papa, y en un acto reflejo se la tragó quedando atrapada en su esófago y se comenzó a atragantar. Trataba de pedir ayuda mientras que se iba poniendo morado por la falta de oxígeno.

Cuando llegó el médico del pontífice nada se pudo hacer, trataron de extraerla pero estaba demasiado oculta o, simplemente, no daban con ella ya que lo hacían “al tacto”. Adriano IV murió asfixiado. No hizo falta conspiraciones ni venenos, bastó una mosca. Federico I suspiró tranquilo.

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