Si en los años 60 los Small Faces, con el liderazgo de Steve Marriott, fue uno de los conjuntos mod más populares y un excelente grupo de pop psicodélico, en la década de los 70, con la llegada de Rod Stewart y Ron Wood, los reconvertidos Faces consiguieron sobresalir con sus crudos sonidos rock’n’roll, honky tonk, folk, hard rock o R&B.

El carisma de Rod Stewart le llevó a iniciar una carrera en paralelo a los Faces que ya había sido principiada con “The Rod Stewart Album” (1969), un disco con la versión del “Street Fighting Man” de los Stones. Más tarde editó “Gasoline Alley” (1970), “Every Picture Tells a Story” (1971) o “Never a Dull Moment” (1972), discos a la altura de lo mejor de los Faces que incluso obtuvieron mejores recompensas comerciales.

Este triunfo personal provocó que la solidez como banda de los Faces, se tambaleara. Así, Ronnie Lane, uno de los principales componentes de los Faces, y co-lider con Marriott en los Small Faces, abandonó el grupo tras el disco “Ooh La La” (1973), cuarto álbum del grupo londinense. En 1974, el grupo dejó de existir.

Rod Stewart continuó su carrera triunfal aunque se alejó mucho de estos primeros inicios, Kenney Jones llegó a tocar con los Who tras la muerte de Keith Moon, y Ron Wood, que debutó en solitario con el disco “I’ve Got My Own Album To Do” (1974), se unió a los Rolling Stones después de la salida de Mick Taylor.

En el año 2012 tanto Faces como Small Faces ingresaron en el Rock And Roll Hall Of Fame.

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