Como antecedente les comentaré que los colores primarios no pueden obtenerse a partir de otros colores, es decir, el rojo, amarillo y azul nunca los podremos conseguir mezclando otros tonos.

Así pues, para mezclar colores debes disponer forzosamente de estos tres colores básicos, y que al mezclaros podremos conseguir muchos otros tonos secundarios.

Si unimos los tres colores primarios: rojo, azul y amarillo, se obtiene el color marrón. Si se juega con distintas cantidades de cada uno de los colores, se pueden obtener muchos tonos terrosos (que tiene el color o el aspecto parecido a la tierra), por lo que lo mejor es ir probando hasta dar con el color exacto que se quiere y/o necesite.

Para conseguir un tono naranja, será necesario mezclar rojo con amarillo. En función del tono que se quiera, deberemos añadir más de uno u otro color, si queremos un naranja intenso añadimos más color rojo mientras que si se buscamos uno menos fuerte entonces lo ideal es incorporar más color amarillo.

Para preparar el color rosa, se deberá de añadir color blanco al color rojo para así rebajar el tono. En función de la intensidad que quiera obtener, será necesario agregar más, o menos color blanco.

Más información: artes.uncomo.com