Boris Nikolayevich Yeltsin (1931-2007) fue un político ruso. Llegó a la presidencia de la Federación Rusa en 1991, cargo que ocupó hasta 1999. Originalmente simpatizó con Mikhail Gorbachev y, bajo la reorganización política llamada perestroika, surgió como un líder político con mucha influencia. El 29 de mayo de 1990 fue elegido líder del Soviet Supremo de Rusia. El 12 de junio de 1991 ganó la presidencia de la República Socialista Federativa Rusa mediante el voto popular, ya disuelta la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS). Durante su gestión el país empezó a adoptar políticas neoliberales que no fueron del todo exitosas, pues gran parte de las riquezas nacionales fueron vendidas a pequeños grupos de poder. Hubo grandes escándalos de corrupción, grandes problemas sociales y dos guerras en Chechenia. En 1993 el Parlamento pidió su renuncia, lo cual llevó a una crisis institucional. Logró sortearla, pero después de seis años de constantes disputas, presentó su renuncia el 31 de diciembre de 1999. Lo sustituyó en el cargo Vladimir Putin. Cuando dejó el cargo, Yeltsin era muy impopular, pues su índice de aprobación entre la población era del 2%.

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