Las personas dedicadas a la oftalmología se llaman oftalmólogos u oculistas (proviniendo esta última denominación del latín).

Un oculista es un profesional que se especializa en trastornos de la visión. El término se utiliza como sinónimo de oftalmólogo, que es el especialista en oftalmología. Este concepto, por su parte, está asociado concretamente a las patalogías vinculadas con las enfermedades que pueden desarrollarse en los ojos.

El oculista, a la hora de indicar qué anteojos son necesarios para cada persona, realiza un análisis de los ojos con instrumentos ópticos que le permiten saber cuál es la graduación que la persona debe llevar en sus lentes.

La especialidad orientada a diseñar, desarrollar y adaptar lentes se conoce como optometría. El optometrista, por lo tanto, es quien receta los lentes que usa una persona para corregir trastornos de la visión como el astigmatismo o la miopía, por citar dos de los más frecuentes.

Uno de los oculistas más antiguos que se conocen y que forman ya parte de la Historia es Mohamed Al-Gafequi, conocido popularmente como oculista Algafequi. Era de origen andalusí, nacido en la localidad cordobesa de Torrecampo, que en el siglo XII marcó varios hitos importantes dentro del área de la visión.

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