La segunda entrega de la saga ¨El padrino¨ nos muestra dos líneas paralelas entre el pasado y los hechos actuales de la historia, considerada la mejor secuela de todos los tiempos.

Tras la muerte de Don Vito Corleone, su hijo Michael (Al Pacino) se convierte en el cabeza de familia. Al tener que negociar con sus enemigos, pierde el apoyo de uno de sus hombres, Frankie Pentageli (Michael V. Gazzo). Tras escapar de un atentado, Michael trata de encontrar al culpable, siendo su mayor sospechoso Hyman Roth (Lee Strasberg), el jefe de la mafia judía, ahora es conciente que su vida corre mayor peligro.

Vito Corleone (que en su etapa de juventud interpreta Robert De Niro), inmigrante italiano, debe huir desde niño de un jefe de una mafia loca y y gracias al sacrificio de su madre el pequeño logra escapar y viajar en barco a Nueva York. El joven crecerá y rápidamente aprende a hacer negocios hasta convertirse en la cabeza de una poderosa organización criminal que dominará la ciudad para la década de los 40, usando la violencia como medio para solucionar cualquier asunto.

Recibió once candidaturas a los Premios Óscar, ganando Mejor Película (la primera secuela en lograrlo y la única en lograrlo junto a su predecesora), Mejor Director (Francis Ford Coppola), Mejor Actor de Reparto (Robert De Niro), Mejor Guión Adaptado (Coppola y Mario Puzo), Mejor Dirección Artística y Mejor Banda Sonora.

La película termina con Michael a solas, meditando sobre todos los sucesos acontecidos.

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