Sophia es un robot humanoide desarrollado por la compañía Hanson Robótics. Ha sido diseñada para aprender y adaptarse al comportamiento humano y trabajar con humanos, y ha sido entrevistada por todo el mundo. En octubre 2017, se convirtió en una ciudadana saudí, siendo así el primer robot con ciudadanía de un país.

En una entrevista, Sophia contó que fue activada el 19 de abril de 2015. Su cara está inspirada en la actriz Audrey Hepburn. Según el fabricante, David Hanson, Sophia tiene inteligencia artificial (IA), procesamiento de datos visuales y reconocimiento facial. También imita gestos humanos y expresiones faciales y es capaz de contestar ciertas preguntas y tener conversaciones sencillas. El robot usa tecnología de reconocimiento de voz y está diseñada con capacidad de aprendizaje. Su software de IA analiza conversaciones y extrae datos que le permite mejorar sus respuestas con el tiempo.

A medida que la noticia se propagaba en las redes sociales, muchos hombres y mujeres sauditas se preguntaron cómo era posible que la nueva ciudadana del país tuviera más derechos que sus conciudadanas humanas.

Cuando le otorgaron la ciudadanía iba vestida sin el velo y sin abaya, el pañuelo y vestido que la ley islámica obliga a llevar a las mujeres de Arabia Saudita. Según el sistema legal del país, cada mujer se ve forzada a tener siempre un acompañante masculino a su lado. Pero en este año, a partir de junio podrán manejar autos y asistir a estadios de fútbol.

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