El Desierto Blanco se ubica a 45 kilómetros al norte de la ciudad de Farafra, en la frontera con Libia, y a unos 400 kilómetros al suroeste de El Cairo, en el desierto occidental de Egipto, entre los oasis de Dakhla y Bahariya

Está situado en el Sahara el Beyda, comienza al norte de Farafra, uno de los oasis occidentales de Egipto. Este, en realidad, está conformado por varios pueblos o aldeas, siendo El Bawiti o, simplemente, Bawiti la más importante.

Su color es blanco, con un claro contraste con el desierto amarillo en otros lugares, ocupa una extensión de 700.000 km2 y esconde dunas, desfiladeros, oasis y unas increíbles esculturas naturales del color de la nieve en su porción más sorprendente.

Miles de años de erosión, provocada por los vientos del desierto y la arena que lleva, han creado curiosas formaciones rocosas sobre el yeso, que es el material que otorga su particular color blanco al área y que contrasta con el amarillo predominante en otras zonas del desierto.

Esta enorme extensión de caliza y creta formando peculiares formas como setas, aves, esfinges o camellos. Las más conocidas son las de la gallina y el champiñón, también las únicas protegidas por una cuerda. Este desierto era el lecho del océano y estas formaciones son el resultado de millones de años de erosión.

La colina de cristal, solo de verla, se entiende su nombre, ya que se trata de una colina repleta de cristales de cuarzo que brillan gracias al sol.

Más información: www.hola.com