La enfermedad de Crohn es una enfermedad intestinal inflamatoria. Provoca inflamación del tubo digestivo, que puede producir dolor abdominal, diarrea intensa, fatiga, adelgazamiento y desnutrición. La inflamación que provoca la enfermedad de Crohn puede afectar distintas regiones del tubo digestivo en diferentes personas.

Dicha inflamación suele propagarse hacia lo profundo de las capas del tejido intestinal afectado, puede ser dolorosa y debilitante y, algunas veces, provocar complicaciones que pueden poner en riesgo la vida.

A pesar de que no se conoce ninguna cura para la enfermedad de Crohn, algunas terapias pueden reducir, en gran medida, los signos y síntomas e, incluso, provocar una remisión de largo plazo. Con tratamiento, algunas personas que sufren la enfermedad de Crohn pueden desempeñarse correctamente.

Las zonas que se ven afectadas por la enfermedad con mayor frecuencia son la última porción del intestino delgado y el colon.

Los signos y síntomas de la enfermedad de Crohn pueden oscilar entre leves y graves, a veces se presentan de forma súbita, sin señales previas. También es posible que tengas períodos sin signos ni síntomas.

Cuando la enfermedad está activa, algunos signos y síntomas pueden ser:

Diarrea

Fiebre

Fatiga

Dolor y cólicos abdominales

Sangre en las heces

Llagas en la boca

Poco apetito y adelgazamiento

Dolor o drenaje cerca o alrededor del ano debido a la inflamación de un túnel hacia la piel (fístula).

Más información: medlineplus.gov