La cromatografía, que literalmente significa "escritura de color", o "registro de color", fue empleada originalmente con sustancias coloreadas.

En 1850, Runge ( químico analítico alemán) describió la formación de zonas coloreadas cuando se depositaban gotas de sustancias colorantes sobre papel secante, pero el desarrollo más importante vino con los experimentos de Mijaíl Tsvet​ (1872-1919), que empleó por primera vez en 1906 el término "cromatografía".

A comienzos del año 1903, Mijaíl Tsvet, botánico ruso, "logró separar" una mezcla de pigmentos de plantas (clorofilas) en una columna de carbonato de calcio. Más tarde, en 1910, cromatografió un extracto de yema de huevo en una columna de inulina. Sus investigaciones, no fueron utilizadas por otros investigadores hasta 1931 cuando Thomas Kuhn, físico estadounidense, empleó la técnica para el análisis de pigmentos de plantas, confirmando los primeros trabajos de Tsvet y su predicción de que el caroteno era una mezcla de varios homólogos estrechamente relacionados y no solo una sustancia .

La cromatografía, usada en todas las ramas de la ciencia, es un "método físico de separación" para la caracterización de mezclas complejas separando los distintos componentes, en el principio de retención selectiva, permitiendo identificar y determinar las cantidades de dichos componentes, cumpliendo dos funciones básicas que se excluyen mutuamente:

* "Separar" los componentes y "Medir" la proporción de estos en la mezcla" *

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