El acetábulo es una estructura ósea que forma parte de la anatomía de la cadera, ya que es el lugar del hueso ilíaco en el cual se introduce la cabeza femoral. Es decir, que participa en la formación de la articulación coxofemoral.

La pelvis es la zona del cuerpo que está formada por varios huesos, debido a la complejidad funcional que presenta. En esta región, encontramos el hueso coxal con sus respectivas partes, más el sacro y el coxis.

De acuerdo al origen etimológico, este término proviene de la época antigua, ya que fue utilizado por primera vez para definir a aquellas regiones óseas que tiene semejanza a una cavidad o copa. Lo que quiere decir que es utilizado para introducir otras estructuras. También es llamado en anatomía cavidad cotiloidea.

El acetábulo se localiza a cada lateral de la cadera, es decir en la parte inferior dónde se unen la porción del isquion, ilion y pubis. Por lo tanto, la región acetabular solo se desarrolla gracias a la fusión entre las estructuras mencionadas.

La función principal del acetábulo, es ser el receptor óseo de la cabeza del fémur. Con lo cual, contribuye activamente a la creación de la articulación de la cadera. Esta articulación es muy importante, ya que es la que permite el desplazamiento y la realización de las diversas actividades que llevamos a cabo día tras día.

Las fracturas del acetábulo producto de traumatismos directos, son las lesiones que más afectan a esta zona de la cadera.

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