El Bosque Sumergido se encuentra en las cristalinas aguas del lago Traful, en la provincia de Neuquén, Argentina.

Se trata de aproximadamente 100 cipreses situados a 30 metros de profundidad en el lecho del lago, plasmando un paisaje de fantasía, capaz de deslumbrar a quienes se animan a bucear entre gigantescos árboles casi intactos.

El bosque se formó durante un terremoto ocurrido en el año 1960, donde se produjo el desmoronamiento de una ladera boscosa que terminó sumergida en el fondo del lago.

Lo más sorprendente es que algunas de las copas de los árboles asoman en su superficie. Las formas y tamaños de los troncos son muy diversos, siendo el paisaje subacuático muy distinto al marítimo.

La vida en el lago es pobre, ya que existen pocas especies, pero muy numerosas.

El salmón del Atlántico, originario de los Estados Unidos se ha adaptado muy bien a la zona del lago. También la trucha arco iris, que se distingue por sus tonalidades azuladas o verdosas en el lomo. Entre las especies nativas se encuentran el puyen, la perca y el pejerrey patagónico.

Cabe señalar que en la zona solo está permitida la práctica de buceo para quienes hayan realizado y aprobado previamente un curso de capacitación, ya que se debe tener mucha cautela en los descensos, puesto que el lecho del lago es muy irregular. Además, la temperatura media del agua es de 10ºC, por lo cual se requiere de una buena aclimatación.

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