El luge (“trineo ligero” en francés) tiene sus orígenes en Davos, Suiza, en 1879.

Los primeros campeonatos del mundo se celebraron en Oslo 1955 y la Federación Internacional de Luge se funda en 1957. Se incorporó a los Juegos Olímpicos en Innsbruck 1964, en la categoría masculina y femenina.

Es un deporte de invierno, en donde los competidores se deslizan tumbados boca arriba en un trineo, sin frenos ni volante para dirigirlo, por una pista artificial de hielo bajo la cual hay una estructura de cemento. Se compite en dos variantes: individual y por parejas; ambas en modalidades masculinas y femeninas.

Es una carrera a contrarreloj en la que todos los competidores están en las mismas condiciones, tanto de peso del trineo, como de peso del participante. El máximo de peso para el trineo oscila entre los 23 y los 27kg dependiendo si es una competición individual o por parejas. Existe un máximo de peso de los participantes, aquellos que estén por debajo pueden usar pesas para igualarlo, para que la competición sea lo más justa posible y el mérito vaya hacia la destreza del piloto.

El inicio de la carrera es decisivo, los participantes comienzan sentados y disponen de unos hierros en la pared de la pista para darse el impulso inicial, y recorren los primeros metros empujándose con los brazos y utilizando guantes especiales con púas de acero para poder impulsarse.

Alemania, Austria, Italia y Rusia, suelen repartirse las medallas en las competiciones importantes.

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