El oso polar u oso blanco (Ursus maritimus) es una especie de mamífero carnívoro de la familia de los osos (Ursidae). Es uno de los carnívoros terrestres más grandes de la Tierra.

Están clasificados como mamíferos marinos porque pasan la mayor parte de su vida en el hielo marino del océano Ártico, siendo el único superdepredador de este lugar. Cuentan con una gruesa capa de grasa corporal y un recubrimiento a prueba de agua que los aísla del aire y el agua fría.

El fósil de oso polar más antiguo que se conoce data de hace aproximadamente 130 000 a 110 000 años. Los fósiles muestran que hace entre 10 000 y 20 000 años, los molares del oso polar diferían significativamente de los del oso pardo. Es posible que la especie se haya originado a partir de una población aislada de osos pardos, sometida a una fuerte presión genética durante las glaciaciones del Pleistoceno.

Estudios genéticos realizados posteriormente muestran que incluso algunas poblaciones de oso pardo se encuentran más relacionadas con el oso polar que con otras de su misma especie;​ esto implica que el oso polar no cumple con algunas de las definiciones de especie. Adicionalmente, las dos especies pueden reproducirse y obtener híbridos fértiles (grolares),​ indicando su reciente divergencia y su similitud genética.

Sin embargo, se consideran especies separadas porque ninguna de las dos especies puede sobrevivir a largo plazo en el nicho ecológico de la otra.

Más información: www.worldwildlife.org