Los archipiélagos de Micronesia, Melanesia y Polinesia fueron habitados originariamente por melanesios y polinesios.

Los melanesios (del griego:melas, negro,nesio, islas) están asentados en un grupo de islas del Pacífico sur, como Nueva Guinea, Kanaky (Nueva Caledonia), Vanuatu, Salomón, Fiji, Santa Cruz, así como en otras más pequeñas y en los archipiélagos de Bismarck y el de las Luisíadas.

Por sus características físicas, constituyen una población homogénea. Debido a la pigmentación oscura de su piel y el cabello en diversos tonos que van del negro al rubio brillante o intensamente dorado (lo cual se debe a una variante genética propia de la región ligada al cromosoma 9, sin ninguna relación con cabello rubio europeo), los melanesios fueron clasificados en el pasado como grupo negroide. No obstante, existen estudios recientes que vinculan este grupo a los papúes e incluso a las comunidades de aborígenes que habitan en Australia.

La economía de los melanesios ha dependido históricamente de la agricultura, la pesca y la recolección, con la yuca, el coco y el taro como alimentos básicos en muchas comunidades. En tiempos más recientes, el turismo y la explotación de recursos naturales han ganado importancia.

En términos religiosos, el cristianismo fue ganando espacio y reemplazando en forma progresiva las formas de religión tradicional, son muy pocas las localidades donde las creencias ancestrales han logrado sobrevivir al empuje del cristianismo.

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