El paradero de este cuadro titulado Tormenta en el Mar de Galilea se desconoce a la fecha. En 1990 fue sustraído del museo Isabella Steward Gardner, situado en Boston, Massachusets. Este hecho se ha considerado el robo de arte más grande en Estados Unidos.

La pieza fue pintada hacia 1633. Es la única marina que se conoce de Rembrandt, de ahí su rareza y especial valor.

Representa una escena bíblica del Nuevo Testamento, donde el mar de Galilea se torna tempestuoso mientras los doce apóstoles y Cristo navegan en una pequeña barca.

En esta obra se pueden evidenciar las características principales de sus obras: el uso del claroscuro, en este caso el contraste entre el brillo del agua y la oscuridad de la parte inferior -que pudiera hacer pensar en el bien y el mal- y la gran representación de las emociones humanas así como la sensación de movimiento. Destaca también la luz y la calma en el rostro del Mesías ante las expresiones de los apóstoles.

La persona que sujeta la cuerda del mástil y mira hacia el espectador es el propio Rembrandt.

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