«Patomskiy» es una extraña formación geológica trae de cabeza a los científicos desde su descubrimiento en 1949. Fue descubierto por el geólogo Vadim Kolpakov en el norte del bosque siberiano de Irkutsk.

Se trata de un extraño cono de piedra caliza con montículo en el centro y un cráter en la cabeza. Su base mide 150 metros y su montículo mayor tiene 40 metros de altura y el más pequeño mide 12. Se estima que la edad del cráter es de unos 250 años.

Su origen no ha podido ser explicado por los científicos. Hay múltiples teorías que apuntan desde que fue creado por una antigua civilización, hasta la construcción por prisioneros de un gulag secreto.

Otra teoría asegura que es producto de un meteorito, pero en el cono, que tiene 150 metros de ancho en la base y 80 en la cima y una profundidad central de aproximadamente diez metros, no se han hallado restos de rocas procedentes del espacio.

El cráter no se asemeja a ningún impacto de meteorito conocido y no existen evidencias de fragmentos de asteroides ni metales bajo la formación.

Otra teoría vincula este cráter en lo profundo del bosque siberiano a un volcán, pero la zona no registra actividad volcánica desde hace millones de años, por lo que no corresponde con la edad de Patomskiy.

Rodeado de superstición, los nativos le atribuyen un carácter malvado, especialmente tras la muerte por ataque acarídaco del líder de una expedición en 2005 para averiguar más sobre este enclave misterioso.

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