Portugal estableció su primera colonia en Brasil en 1530. Los colonos crearon plantaciones de caña de azúcar a lo largo de la costa y enviaron diamantes y oro a Europa. Pronto, personas de África Occidental fueron llevadas a Brasil para trabajar como esclavas. El descubrimiento de grandes reservas de oro en el interior atrajo a miles de personas al país. En 1789, los brasileños intentaron expulsar a sus gobernantes portugueses. La rebelión pronto fue sofocada, pero comenzó un movimiento de independencia. En 1822, Brasil era una nación soberana. Los reyes de sangre portuguesa gobernaron hasta 1888, cuando los líderes militares y terratenientes expulsaron al rey, y Brasil se convirtió en una república federal.

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