Los escorpiones o alacranes son un orden de artrópodos de la clase de los arácnidos. Están provistos de un par de apéndices en forma de pinza (pedipalpos) y una cola acabada en un aguijón provisto de veneno. En algunos casos la potencia de su veneno dañar animales de gran tamaño, incluido el ser humano.

La historia evolutiva de los escorpiones se remonta a 435 millones de años. Viven principalmente en los desiertos, pero se han adaptado a una amplia gama de condiciones ambientales, y se pueden encontrar en todos los continentes excepto en la Antártida. Hay más de 2 500 especies descritas, con 22 familias existentes (vivas) reconocidas hasta la fecha. Su taxonomía se está revisando para tener en cuenta los estudios genómicos del siglo XXI.

Se alimentan principalmente de insectos y otros invertebrados, pero algunas especies se alimentan de vertebrados. Utilizan sus pinzas para sujetar y matar a sus presas. El aguijón venenoso puede utilizarse tanto para matar a la presa como para defenderse de los depredadores.

El cuerpo de los escorpiones está recubierto por finos pelos y por un exoesqueleto quitinoso (polisacárido) el cual está dividido en dos segmentos o tagmas: cefalotórax o prosoma y abdomen o mesosoma. A medida que el animal crece, muda de 5 a 7 veces hasta alcanzar el tamaño adulto.

El tamaño de los escorpiones abarca un rango muy amplio. Mientras unos pueden medir 1,2 cm, otros llegan a registrar 20 cm como el escorpión emperador (Pandinus imperator).

Más información: www.scorpionworlds.com