El récord mundial se obtuvo en una competencia que se llevó a cabo en el Regimiento de Coraceros de Viña del Mar el 5 de febrero de 1949, obteniendo allí un salto de 2,47 metros de altura, superando la anterior marca registrada que era de 2,44 metros y provenía de un salto fabuloso dado por el jinete italiano Antonio Gutiérrez montando a Ossopo.

Aunque parezca mentira el récord de salto proviene de 1949 y lo lograron en Chile, a veces en los tiempos modernos nos olvidamos de la historia, sobre todo porque en muchos casos no hay quien nos la cuente, pero en esta ocasión he investigado para ustedes un poco acerca de los récords de salto en equitación, el cual fue obtenido por el chileno Alberto Larraguibel, el cual era un jinete militar chileno con su caballo Huaso.

Huaso, el ejemplar chileno, era un caballo maravilloso que al nacer fue bautizado por sus dueños como Faithful (fiel) el cual nació en 1933, diesis años antes de lograr su heroico salto, lo cual le garantizó desde ese momento que hasta el final de sus días pasara su tiempo descansando en la Escuela de Caballería, en donde paseaba por los jardines y campos sin que nadie lo volviera a montar nunca más.

El 24 de agosto de 1961 murió este caballo a los 28 años, sus restos hoy en día descansan en la Escuela de Caballería Blindada de Quillota, Chile. Su hazaña no ha sido superada aún, manteniendo el récord mundial de salto alto en equitación. A fines de 2007 fue instalado un monumento en su recuerdo.

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